martes, 6 de marzo de 2012

Ricardo Luque - Las cuentas pendientes del gobierno de la gente


Las cuentas pendientes del gobierno de la gente

César Ricardo Luque Santana

Luego de casi tres meses sin recibir su aguinaldo, los trabajadores de confianza del FIBBA no quitan el dedo del renglón respecto a su reclamo. La crisis de las finanzas públicas heredada de la administración anterior, no ha permitido al gobierno que encabeza Roberto Sandoval hacer frente a esta obligación legal que tiene con estos trabajadores, pero tampoco se han tomado la molestia de dar explicaciones a los afectados ni de hacer propuestas concretas para solventar el problema.

Este caso en particularse ha venido denunciando desde hace una tres semanas y ha adquirido cierta resonancia social gracias a las declaraciones que el diputado Miguel Ángel Arce Montiel ha vertido a diversos medios de comunicación escritos y electrónicos, quien asimismo ha estado gestionando ante las autoridades del FIBBA, la Secretaría de Finanzas y la Secretaría de Gobernación, el pronto pago del aguinaldo a dichos trabajadores. Huelga decir que las autoridades aludidas han reconocido ese pendiente y han manifestado su interés por resolverlo, pero el caso es que esa solución no llega aun y los trabajadores están desesperados porque las deudas que contrajeron en diciembre los agobian.

Por esta razón, El 5 de marzo pasado, el diputado Arce Montiel acompañado del asesor jurídico de la fracción parlamentaria del PRD de la XXX Legislatura, el licenciado Mártir Alegría, acudieron a un encuentro con los trabajadores afectados en las propias instalaciones del FIBBA en Nuevo Vallarta, Nayarit. En esta reunión estuvo presente también dando la cara por la parte patronal el licenciado Eduardo Franco quién dijo que el director del FIBBA Rosales Vega ha gestionado por escrito ante Gerardo Siller y José Espinoza respectivamente esta problemática sin obtener respuesta alguna. En este punto algunos trabajadores le solicitaron copias de los documentos que acrediten dichas gestiones.

La asamblea empezó con un mensaje del diputado Arce solidarizando con su demanda, evocando la legalidad y legitimidad de su reclamo, manifestándoles que ha estado gestionado ante las autoridades correspondientes este problema conminándolos a resolverlo, que ha denunciado mediáticamente el problemalamentando que las autoridades no den explicaciones satisfactorias ni hagan compromisos públicos con los trabajadores afectados con propuestas concretas. Añadió que esta situación es más ominosa todavía cuando se está próximo a la realización del Tianguis Turístico en Nuevo Vallarta, donde justamente estos trabajadores son los que mantienen bello y limpio ese paraíso de gran turismo.

El abogado Mártir Alegría por su parte, explicó a los trabajadores la cuestión jurídica que en última instancia se podría realizar para defender sus derechos decantándose firmemente por una negociación conciliadora y alertó a los trabajadores que si se pretende llegar al paro laboral o tomar medidas radicales, consideren las consecuencias de todo tipo que sus actos pueden acarrear, exhortándolos todo el tiempo a mantenerse dentro del marco legal y de la negociación política. En este sentido, un posible paro laboral tendría que correr los trámites legales de rigor ante las autoridades laborales correspondientes. Aun así, considera que no es recomendable este camino porque el conflicto puede prolongarse en el tiempo.

En este punto intervino el licenciado Franco quien hizo uso de la palabra también en otras ocasiones. Dijo que de parte del FIBBA se están haciendo esfuerzos por cumplir esa obligación patronal y que por lo pronto se les ha seguido pagando puntualmente su salario. Hizo un ofrecimiento de saldar la deuda con los trabajadores en tres pagos, dos en este mes de marzo y la restante en la primera quincena de abril. Los trabajadores se mostraron en desacuerdo en que se les pague de ese modo y reclaman su pago en una sola emisión. El funcionario insistió en que hay voluntad de pagarles, recordó que apenas se acaba de cumplir el pago de esa misma prestación a los sindicalizados y que ello se ha hecho con recursos propios. En general el representante del FIBBA se mostró conciliador y preocupado, pero de manera impropia y creo que involuntaria, cuestionó la presencia del diputado Miguel Ángel Arce Montiel y del abogado Mártir Alegría como mediadores. El diputado Arce, con la prudencia que le caracteriza, no contestó inmediatamente a esta alusión que para algunos presentes sonó a intento de descalificación, pero más adelante el legislador perredista expuso con claridad la legitimidad de su participación en este movimientoseñalando que no es ningún aventurero político, sino que actúa por convicciones y amparado ensu investidura como diputado que lo obliga a atender a la gente que solicita sus buenos oficios. Sus palabras fueron más para dejar claro la legitimidad de su intervenciónen el conflicto que para reprocharle al funcionario su desliz. Esta alocución le ganó un fuerte aplauso de los asistentes. Al final de la reunión incluso, el diputado Arce pasó a la oficina del licenciado Eduardo Franco a despedirse de él respetuosamente.

Los trabajadores por su parte, tanto hombres como mujeres, estuvieron muy participativos y firmes en sus reclamos, preguntando sus inquietudes, procurando información clara, etc., tanto del diputado Arce, como del funcionario Franco y del abogado Mártir Alegría. También mostraron cohesión de grupo, claridad en sus planteamientos, insistieron que lo suyo no es grilla ni debe tomarse como tal, manifestaron su compromiso de seguir cumpliendo escrupulosamente con sus quehaceres laborales para evitar dar motivos de represalias. Decidieron volver a reunirse en el mismo sitio este viernes próximo (9 de marzo) con la presencia del diputado Arce y probablemente del mismo director de FIBBA Rosales Vega, pues así lo prometió el licenciado Franco.

Luego que el licenciado Franco se retiró, el diálogo entre el diputado Arce y los trabajadores continuó por un buen rato. El legislador insistió que su función es acompañarlos solidariamente en su movimiento pero que las decisiones a tomar les competen solamente a ellos. Los trabajadores por su parte, mostraron siempre una actitud conciliadora deliberando respetuosa e inteligentemente con sus interlocutores, pero al mismo tiempo, se notaba en ellos síntomas de desesperación e incluso de exasperación, tanto en sus rostros, gestos y palabras.

Por último, se puede decir que prevaleció en todos los participantes de este encuentro un espíritu conciliador que presagia un buen final de este problema. Que así sea.